La iluminación LED llegó para quedarse, y es que el ahorro de energía y su larga duración son solo algunas de sus ventajas. Es tal el terreno que ha ganado, que esta clase de iluminación se ha diversificado en cuanto a modelos, formas y tamaños. Por eso, en esta ocasión, queremos hablarte de los distintos tipos de focos LED, específicamente sobre bombillas LED de techo, así podrás elegir la más adecuada de acuerdo a tus necesidades y características del espacio a iluminar.
Los focos LED cuentan con distintas características y pueden clasificarse de distintos modos, estos son algunos aspectos fundamentales que debes tomar en cuenta a la hora de realizar tu elección. En efecto, puedes conseguir la luz ideal, pues siempre hay un modelo que puede ajustarse exactamente a lo que buscas.
Tipos de casquillos de bombilla
El primer aspecto que hay que tomar en cuenta es el tipo de casquillo del foco. Antes que nada, cabe informarse sobre la instalación que va a realizarse que a su vez depende del soporte con el que cuentes. Con base en ello, se va a elegir la clase de casquillo que sea más adecuado. Con una letra estará indicado el tipo de casquillo, seguido de un digito que refiere al diámetro del mismo en milímetros.
Los casquillos de bombilla más comunes que podemos encontrar son:
Casquillo E27: casquillo de rosca más ancho
Las lámparas con este casquillo son adecuadas para la iluminación general de estancias del hogar como habitaciones, garajes, pasillos o bodegas, aunque también pueden usarse en exteriores. Con este casquillo encontramos bombillas decorativas de todo tipo. Por lo general, las bombillas con el casquillo E27 están diseñadas para 230V.
Nuestro foco LED A19 cuenta con chips SMD LED de alta potencia, larga duración y bajo consumo dando como resultado un ahorro en el consumo eléctrico. Para residencias, oficinas y áreas comunes, gracias a su base universal, puede sustituir a la mayoría de las lámparas halógenas del mercado: sus áreas de aplicación en interiores son casi ilimitadas.
Casquillo E14: casquillo fino.
Estas bombillas tienen una menor potencia de entrada (25 W o 40 W), están diseñadas especialmente para lámparas de diseño y decoración, lámparas de araña o iluminación de cocina. Tienen forma de vela o gota. El casquillo E14 también podemos encontrarlo en las bombillas reflectoras. El casquillo E14 es muy común también para bombillas de bajo consumo.
Casquillo GU10: para focos sin transformador
Casquillo GU5.3: para focos con transformador
Temperatura del color, ¿cálidas o frías?
Hemos hablado en anteriores entradas de la temperatura de iluminación. Hace referencia a la tonalidad que desprende la fuente lumínica y se mide en grados Kelvin. Entre mayor sea el número, se dice que la luz es más fría.
Una luz cálida desprende tonos amarillos y rojizos, mientras que la fría tiende hacia el blanco y el azul. Una luz, por ejemplo, de 3 500 K es ideal para crear ambientes acogedores en una habitación o una sala; para una concina o área de trabajo, puedes inclinarte por una luz más fría.
Ángulo de apertura de luz en focos LED
Otro aspecto fundamental a tomar en cuenta es el ángulo de apertura de la bombilla. No es lo mismo iluminar una gran estancia que una pequeña, donde además necesites luz más focalizada.
Los grados de apertura van a indicar qué tanta área puede cubrir el foco, más exactamente, con qué ángulo se va abriendo el haz de luz y, por tanto, define el área que puede iluminar en función de la distancia a la fuente de luz. Teniendo esto en cuenta, puedes determinar la cantidad de focos que vas a utilizar y su distribución.
En un pasillo, por ejemplo, pueden colocarse focos de 90º de apertura con una separación de un metro, obtendrás una iluminación óptima. Si se quiere una luz de acento para resaltar un objeto particular o un área de trabajo, se recomienda usar focos con menor ángulo, pero alta intensidad.
Son dos factores principales los que debes tener en cuenta: la atura del techo y la extensión del espacio a iluminar. Cuanta más altura, lo más recomendable es una luz con un gran ángulo de apertura (180º, 280º o 360º). La luz será uniforme y se repartirá por toda la estancia. En contraste, cuando hay poca altura, puedes usar ángulos más cerrados.
Potencia y flujo lumínico
Hay bombillas con distinto consumo energético, esto viene indicado en Vatios (W). El flujo lumínico (Lm), por su parte, indica la cantidad de luz que emite la bombilla. Es importante ver la correlación que existe entre estos dos estándares. Una bombilla eficiente será aquella que emita suficientes lúmenes con un bajo consumo de energía. En este departamento las luces LED llevan una gran ventaja. 40W equivalen aproximadamente a 450 Lm de una bombilla LED o 100 W a unos 1.600 Lm. En síntesis, producen más luz con un menor consumo.
Debes tomar en cuenta también las necesidades de la estancia, pues no todas necesitan la misma intensidad, sobre todo zonas de trabajo son en las que mayores lúmenes son necesarios.
El Foco LED GU10 Apertura 38° 6 Watts 500 lm 120 V Atenuable Illux es altamente eficiente. Proporciona luz blanca cálida, una duración excepcional y un ahorro de energía significativo. Cuenta con una vida útil de 25 000 horas y ofrece 500 lúmenes de luz inmediatamente, sin tiempo de espera para calentar hasta el brillo total.
Podrás elegir entre 5 temperaturas de color que rondan los 2 700 Kelvin. Este foco simula la luz del día, proporcionando una luz blanca cálida nítida para cualquier habitación, ideal para dormitorios. Además, es un producto ecológico: no contiene ningún tipo de gas ni mercurio, adicionalmente consume 6 W para producir los mismos lúmenes que las bombillas incandescentes de 50W. Por su parte, el Foco LED MR16 con casquillo GU5.3 es de 4.5W, su equivalente en incandescente es 35W.
Ahora que conoces a profundidad las distintas características de los focos LED y su amplia gama de modelos, puedes elegir la mejor para cada estancia que desees iluminar, no olvides tomar en cuenta todos estos factores y, si persisten las dudas, nuestro equipo de expertos estará encantado de ayudarte.