El mercado de luces LED es cada vez más grande y es que la tecnología ha posibilitado que las lámparas se adapten cada vez mejor a las necesidades del usuario y los distintos tipos de espacio. Como hablamos en la anterior entrada, cada espacio tiene exigencias distintas y en este artículo nos centraremos en las diferentes aplicaciones que puede tener una lámpara y cuál conviene utilizar en cada caso.
Luminarias de empotrar
Seguramente estás familiarizado con este tipo de luminarias. Son aquellas que se instalan incrustadas en un muro, generalmente el techo. Tienen distintos usos, pero el principal es ofrecer iluminación general al espacio, es decir, cubrir de luz uniformemente la totalidad del área.
En las luminarias empotrables en el techo, la luminaria queda oculta siendo lo ¡que sobresale solo la luz que emite. Las luminarias no parecen un elemento de diseño añadido, sino que están integradas completamente en la arquitectura. Cuando se trata de focos empotrados, uno de los aspectos más importantes a tomar en cuenta es su distribución, para ello hay que considerar el ángulo de apertura para que haya suficiente luz.
Es posible servirse de este tipo de iluminación tanto en entornos residenciales como comerciales, y puede utilizarse como iluminación ambiental. Al ser discretas y fáciles de instalar, las lámparas empotradas son una excelente opción para espacios pequeños ya que no interfieren con la decoración ni quitan sensación de amplitud. Pueden usarse, por ejemplo, en armarios, cocinas, salones y pasillos, aunque en la habitación o sala de estar también son usuales en complemento con otro tipo de luminarias.
Una luminaria empotrada se conforma de tres elementos:
Marco: sirve para fijar la luz en el techo.
Carcasa: consiste en una cubierta metálica cilíndrica que es donde se alberga la bombilla y otras partes de la luminaria ocultándolas en el interior del techo.
Embellecedor: es el elemento visible de la luminaria y está insertado en la carcasa. Da a la iluminación un buen aspecto y contribuye a la estética.
Los downlights y los bañadores de pared son perfectos para obtener una iluminación general excelente con un extraordinario confort visual. Los proyectores orientables son ideales para la iluminación de acento. ¡Echa un vistazo a nuestros productos para empotrar!
A diferencia de las lámparas empotradas, las luminarias de riel tienen la ventaja de la versatilidad: al ser dirigibles, podemos disponer de ellas a nuestra conveniencia. Suelen utilizarse en exposiciones, mostradores o tiendas; sin embargo, cada vez se ha popularizado más su uso doméstico. Un hogar con una gran sala de estar, un estudio o una biblioteca puede verse favorecida con lámparas de riel. Además de tener la posibilidad de acentuar algunos elementos como une textura del muro, una escultura o la misma biblioteca, funciona como elemento decorativo que, sin duda, le dará un toque muy moderno y especial a ese espacio del hogar.
Las luminarias LED Illux para riel permiten incrementar fácilmente la iluminación interior de cualquier habitación, dándole un toque sencillo y moderno. Sus acabados elegantes y pulcros no interfieren con la decoración y proveen de una iluminación de calidad para resaltar cualquier detalle en espacios, ese cuadro o fotografía que tanto te gusta.
Las lámparas colgantes tienen una doble función: por un lado, son un elemento decorativo, que añade un toque especial a una sala, comedor o cocina; por otro, proveen de iluminación puntual para llevar a cabo adecuadamente distintas tareas. La iluminación puntual, en contraposición con la general, se refiere a aquella luz más intensa pero que cubre un área menor, funciona para facilitar la realización de actividades más específicas como comer, cocinar o leer.
Es importante utilizar este tipo de luminarias solo en espacios amplios ya que en espacios pequeños puede más bien estorbar y afectar a la comodidad. Existen distintos modelos que pueden utilizarse en una isla de cocina o sobre la mesa del comedor. Ya sea que tu casa tenga una decoración vintage, clásica, tradicional, rústica, o más moderna, hay un modelo que se adapta. Por regla general, procura colocar la luminaria por lo menos 60cm sobre la superficie.
Illux recomienda: es tendencia la instalación de múltiples lámparas colgantes del mismo modelo a diferentes alturas para otorgar dinamismo al espacio y crear un efecto atractivo.
Cuando la prioridad es la fácil instalación y la versatilidad, las lámparas para sobreponer son la mejor opción. A diferencia de las luminarias empotrables, las de sobreponer no necesitan incrustarse en el muro, sino que se adhieren con sistemas de fijación. En ocasiones, las mismas características de construcción no permiten lámparas empotrables, por ejemplo, cuando los muros son de plafón.
Un ejemplo paradigmático son las lámparas de emergencia. Lo mejor es que se coloquen por encima del muro y que se pueda disponer de ellas a conveniencia del usuario. Las lámparas para sobreponer suelen ser redondas y de pequeña altura, muy útiles cuando se trata de espacios pequeños como baños o armarios.
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